Pese a que por las funestas experiencias del pasado en la región cualquier comentario de un militar latinoamericano sobre política genera inquietud, el jefe del Ejército de Brasil no parece dispuesto a guardarse sus opiniones.
Tras la polémica que causaron sus declaraciones previas a la detención de Luiz Inacio Lula, el general Eduardo Villas Boas resaltó ayer que las fuerzas armadas no pueden ser “indiferentes” a las “reales amenazas a la democracia” como la corrupción, la impunidad, el crimen y la polarización política a seis meses de las elecciones.
En un acto en el cuartel general del Ejército en Brasilia, encabezado por el presidente Michel Temer, Villas Boas pronunció un fuerte discurso de tono político que reavivó las suspicacias que ya había despertado a principios de mes, antes de que Lula fuera preso.
“No podemos ser indiferentes a los más de 60.000 homicidios por año, a la banalización de la corrupción, a la impunidad, a la inseguridad vinculada al crecimiento del crimen organizado y a la ideologización de los problemas nacionales. Esas son las reales amenazas a nuestra democracia y contra las cuales necesitamos unirnos efectivamente, para que no retarden el desarrollo y perjudiquen la estabilidad”, dijo.
La primera semana de abril, horas antes de que el Supremo Tribunal Federal (STF) negara a Lula un pedido de habeas corpus que le permitiera apelar su condena por corrupción en libertad, Villas Boas suscitó una fuerte controversia al escribir en Twitter que el ejército repudiaba la impunidad y que estaba “atento a sus misiones institucionales”.
Sus palabras fueron tomadas entonces como una indebida presión a la Corte. Ahora fue más allá y dio incluso recomendaciones sobre cómo se debe encarar el delicado período antes de los comicios de octubre.
“El momento requiere equilibrio, conciliación, respeto, ponderación y mucho trabajo. En las elecciones cabrá a la población definir, de forma libre, legítima, transparente e incontestable, la voluntad nacional. Definido el resultado de la disputa, unámonos como nación”, advirtió a un público que incluía a Temer -que buscaría la reelección- y a otros dos candidatos, el diputado ultraderechista Jair Bolsonaro (Partido Social Liberal) y el senador Álvaro Dias (Podemos).
La ultraderecha aplaude
Mientras desde el gobierno prefirieron no reaccionar a las expresiones políticas de Villas Boas, el diputado ultraderechista Jair Bolsonaro (Partido Social Liberal) -capitán en reserva del ejército- buscó rápidamente apoyar a su excompañero de arma.”Lo respaldo y recibo su mensaje con mucha satisfacción”, subrayó Bolsonaro, segundo en intención de voto luego de Lula, si bien el exmandatario no podría competir por haber sido condenado en segunda instancia, y por estar preso.
fuente diario la republica
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